Las 20 setas comestibles más populares en Minobu
En el corazón de Japón se encuentra Minobu, una región famosa por su rica diversidad micológica. La singular geografía de este santuario verde ofrece un entorno idílico para una gran variedad de setas. En esta lista, haremos un viaje culinario por los principales 20 hongos comestibles que se encuentran en Minobu. Profundizaremos en detalles sobre su aspecto distintivo, sus fascinantes hábitos de crecimiento y el sabor único que aportan a nuestras mesas. Descubra el sabroso mundo de los hongos estimulado por las diversas condiciones del ecosistema en Minobu, a la espera de ser explorado y saboreado.
* Aviso legal: El contenido de los comentarios NO PUEDE utilizarse como base a la hora de COMER PLANTAS. Algunas plantas son MUY VENENOSAS. Compre plantas comestibles a través de canales oficiales.
Las setas comestibles más populares
1. Pollo del bosque
La pollo del bosque (Laetiporus sulphureus), es un hongo muy notable por su gran tamaño y vivos tonos anaranjados a los que debe su nombre común. Crece en las heridas de los árboles, a los que acaba destruyendo. Su carne es muy abundante, existiendo ejemplares que superan los 20 kilogramos.
2. Matacandil
El matacandil es una seta muy apreciada entre los aficionados a la recolección de setas. Una vez abierta, tiene un aspecto similar a la Macrolepiota rhacodes, aunque esta es ligeramente tóxica: en caso de confusión, es mejor desecharla puesto que ya estará pasada en cualquier caso.
3. Shiitake
Este hongo, conocido como shiitake, es una especie comestible caracterizada por un intenso aroma. Originario de Asia Oriental, es muy popular en el continente y suele emplearse en sopas y revueltos, a menudo deshidratada. En países como Japón, el consumo medio de la shiitake ronda los dos kilos anuales por persona.
4. Seta de chopo
El seta de chopo es un hongo sapróbico que suele aparecer en tocones de sauces y álamos, así como en árboles moribundos o astillas de madera. Este hongo presenta un sabor a nuez, es comestible y se ha cultivado desde la Grecia y la Roma clásica. Hoy en día, sigue siendo apreciado en la gastronomía oriental.
5. Rocites arrugado
El rocites arrugado u hongo gitano se suele encontrar en simbiosis con coníferas y hayas en bosques de zonas húmedas. Se trata de una seta muy apreciada en gastronomía en aquellos lugares donde crecen en abundancia. El rocites arrugado se asemeja a otros cortinarius como el Crocolitus o el Claricolor, pero estos carecen de su anillo característico.
6. Pleurotus djamor
El Rose-Seitling, Rosa Seitling o Flamingo-Seitling (Pleurotus djamor, syn. P. salmoneostramineus) es un agárico de la familia de los parientes de Seitlings. Habita en madera herida o muerta y forma cuerpos fructíferos rosados, que son populares como hongos comestibles, especialmente en el este de Asia.
7. Oreja de vaca
La oreja de vaca es un tipo de seta invernal que crece, sobre todo, sobre restos leñosos semienterrados. Su forma recuerda a la tremella mesenterica, aunque se diferencian por el color y la consistencia, que no es para nada viscosa. Popularmente conocida como oreja de vaca y cresta de gallo, tiene un color y una textura particulares.
8. Lacaria amatista
El color violáceo de la lacaria amatista la hace fácilmente reconocible entre otras setas, especialmente cuando forma grandes grupos bajo árboles de hoja perenne o caduca. Se la encuentra principalmente en el otoño, donde su coloración resalta contra las hojas secas. Si se la corta, empero, este color desaparece a los pocos minutos.
9. Boleto cavado
El boleto cavado es una seta europea que presenta un característico sombrero marrón y peludo y un tallo hueco que la suelen hacer inconfundible. Su pariente norteamericano, el suillis ampliporus, guarda un gran parecido con ella y se han catalogado durante mucho tiempo como la misma especie. El boleto cavado fructifica en verano y otoño, estableciendo relaciones micorrízica con alerces y abetos rojos.
10. Clavaria zollingeri
El clavaria zollingeri es una seta que llama la atención por sus colores vivos, sin embargo en especímenes viejos el color no es tan vibrante y se torna marrón grisáceo. Esta seta no es comestible. Encontrar esta seta es difícil porque es muy rara. Un rasgo distintivo es su suave olor a rábano.
Más