Almacenamiento en bolsa de papel: Use una bolsa de papel para permitir la liberación de humedad y evitar el ablandamiento.
Envoltura en paño: Envuelva los hongos en una tela húmeda para mantener la humedad sin empaparlos.
Almacenamiento en bolsa de plástico perforada: Almacene en una bolsa con agujeros para equilibrar la retención de humedad y la circulación de aire.
Almacenar en envase original: Manténgalo en su empaque original si facilita la respiración y el equilibrio de la humedad.